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lunes, 29 de agosto de 2011

JMJ 2011- 10 PERROFLAUTAS 0

He aquí un artículo aparecido el día de hoy en le periódico "La Gaceta" que resume, de una manera contundente , el éxito de la JMJ 2011  celebrada en Madrid.
El autor es D. Francisco José Fernández de la Cigoña

Cautivo y desarmado el ejército de los objetores a las Jornadas Mundiales de la Juventud, éstas han alcanzado sus últimos objetivos. La guerra ha terminado. Así de políticamente incorrecto. Pero es que a uno, a veces, le gusta ser tocanarices. Y más todavía ante una victoria tan espectacular.
Primero nos vendieron el fracaso del número. Que las previsiones más optimistas habían rebajado muchísimo el número de los que iban a venir a Madrid. Con un canto en los dientes nos podríamos dar si se llegaba a los 500.000 jóvenes. Que muchos eran. Pues toma ciribicundia. Entre millón y medio y dos millones. Ni los organizadores habían previsto esa afluencia y resultaron insuficientes los espacios preparados. A última hora hubo que habilitar malamente fincas aledañas para acoger, aunque en pésimas condiciones, a los que ya no cabían en los lugares previstos.
Después se nos alarmó con la manifestación laica contra las Jornadas. Ciento cincuenta organizaciones convocaron una marcha de protesta contra las Jornadas que fue aireada por todos los medios. Entre los convocantes había curas, “indignados”, partidos políticos, gays y lesbianas, ateos, republicanos… Eso sí que iba a ser lo que reuniría multitudes contra Benedicto XVI. Pues ni siquiera el parto de los montes. Apenas dos mil manifestantes que hicieron un ridículo como la copa de un pino. Y qué manifestantes. Se ganaron a pulso la denominación general de perroflautas. Y pienso que los perroflautas auténticos se tuvieron que sentir molestos con que se aplicara su nombre a aquella chusma agresora y maloliente que insultaba a monjas y pateaba a jóvenes.
Vino luego lo del coste. Con mis impuestos no. Se demostró lo del coste cero para los bolsillos de contribuyentes tan celosos de la buena inversión de sus impuestos y sin embargo tan generosos con las subvenciones a partidos, sindicatos, cine español, clínicas abortistas, memoria histórica, colectivos anticatólicos, lesbianas de Zimbawe, desfiles de orgullo gay y demás pozos sin fondo donde se está enterrando el dinero de los españoles. Pero es que además se ha demostrado que el dinero que se gastó fue amplísimamente superado con los ingresos que en España han dejado los cientos de miles de peregrinos. La hostelería madrileña y la de otros lugares de España vería como una bendición de Dios que hubiera diez o doce JMJ al año. La crisis se habría terminado.
Los sindicatos también quisieron colaborar al fracaso de la Jornada convocando una huelga de Metro que alteraría gravemente la buena marcha de la misma. Afortunadamente recapacitaron ante las críticas que recibirían de la sociedad española, en unos días agónicos de esas organizaciones que nadie respalda salvo sus liberados, y terminaron desconvocando la huelga.
Desde sectores ultrapuristas del catolicismo, y todavía más ultraminoritarios, se intentó una canallesca campaña de descrédito de las Jornada queriéndola presentar como una orgía en la que era posible toda clase de excesos. Con patatas se lo han tragado. Un comportamiento ejemplar incluso en situaciones adversísimas. Alegría, piedad, recogimiento… Verdaderamente asombroso el comportarse en todo momento de esos cientos de miles de jóvenes. El Samur no tuvo que atender ni un caso de intoxicación etílica. La policía no registró ni un incidente.
El Papa, visiblemente impactado por todo lo que presenció, no ha ocultado su inmensa satisfacción por cómo se desarrolló el evento. Estaba verdaderamente encantado y así lo manifestó varias veces. Su negativa a abandonar, en medio de una tormenta desatada, Cuatro Vientos, como tal vez lo aconsejara la prudencia, es el mejor testimonio de su solidaridad con los jóvenes en aquella adversa situación. La “aventura” que vivieron juntos, cuando el cielo parecía desplomarse sobre ellos, y no es ninguna metáfora, creo que la recordará toda su vida. Y es la mejor prueba de un enorme amor recíproco. El de los jóvenes al Papa y el del Papa a los jóvenes.
El 90% de los jóvenes extranjeros, según una encuesta, recomendará a España de regreso a sus países. Y no pocos de ellos querrán volver. A Madrid, a las diócesis que les acogieron o a otros lugares de España que no han podido conocer. Ha sido una extraordinaria propaganda gratuita y que no tiene precio. Miles y miles de personas hablando bien de nosotros. Pese al calor, la tormenta, el cansancio y los perroflautas.
La guerra ha terminado. Y la victoria ha sido total. Nadie hubiera podido soñarla tan completa. Es como si Dios hubiera estado, con especial dedicación, sobre la Jornada Mundial de la Juventud en Madrid. Ante la contundencia del resultado sería absurdo empeñarse en buscar defectos y carencias que naturalmente los hubo. Ante un contundente 10 a 0 en un partido de fútbol es ridículo señalar si el interior izquierdo no estuvo afortunado en algunos pases o si el delantero centro falló tres regates. Pues ese fue el resultado. Jornada 10, Perroflautas de todo pelaje 0.
Alabado sea Dios.

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