miércoles, 26 de febrero de 2020

Calentando motores



Pocos días quedan ya para nuestra Semana Grande y la gran cantidad de actos procesionales programados hacen   necesario iniciar la actividad con la suficiente antelación para asegurar un nuevo éxito.

Comienzan pues los ensayos de portadores y portadoras de la Germandad de Jesús Captiu i Nostra Senyora dels Dolors, ensayos necesarios para adaptarnos y aprender los diferentes pasos procesionales con los que desfilaremos por las calles de nuestra ciudad. Y lo que es más importante acostumbrar nuestros hombros a la carga que deberán soportar en esos días, pues nuestros tronos son de los de mayor envergadura y peso de la ciudad.




No por eso debemos olvidar los momentos de divertimento y confraternización, por ello el domingo 16 de febrero se organizó una matinal en la que una vez montada la estructura metálica de uno de los tronos, que se utilizará posteriormente en los ensayos, pudimos degustar unas butifarras a la brasa que nos permitió entre bocado y bocado intercambiar sensaciones e ilusiones.



El martes 18 se iniciaron ya los ensayos de portadores.



Recordaremos melodías conocidas de nuestras marchas procesionales  y escucharemos algunas nuevas. Adaptaremos nuestros pasos procesionales a nuevas y antiguas para dar mayor esplendor en nuestros desfiles.



Adaptaremos nuestras posiciones a los lugares de carga óptimos para hacer, si esto es posible, más llevaderas las largas y duras jornadas procesionales.

Pero no podemos finalizar este post sin mencionar a quienes durante todo el año no cesan su actividad y semana tras semana de ensayos hacen crecer nuestra hermandad. Queremos referirnos a nuestra agrupación musical, l'Agrupació Musical Captiu-Dolors, que como no nos cansaremos de decir hacen mucho más llevaderas  y elegantes nuestras salidas procesionales. Su dedicación y constancia les han llevado a ser referentes en el panorama musical cofrade de Catalunya.

Iniciamos, pues, con gran ilusión esta nueva etapa que esperamos nos lleve una vez más a ser merecedores de los elogios que recibimos en nuestras procesiones. 




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